¡Hola Au Pairs!
¿Habíais oído hablar alguna vez del Elf on the Shelf?
Yo descubrí su existencia en Irlanda y me parece una de las tradiciones navideñas más divertidas.
Los niños se lo pasan bomba buscando cada mañana al muñequito y los adultos…
Bueno, ¡a más creatividad, mejores travesuras! 😉
No digo más.
Pero antes, para las que no sepáis de qué va todo esto, aquí va la explicación:
¿Qué es el Elf on the Shelf?
El Elf on the Shelf o “Elfo en la repisa” es un pequeño muñequito alargado vestido de rojo y blanco con un gracioso gorro en pico con los mismos colores.
Fue creado por Carol Aebersold en 2005, cuando lanzó un libro junto al elfo explicando su significado e historia.
Como veis, es una tradición navideña bastante nueva.
El libro se puede comprar en Amazon, por lo que se puede extender a cualquier parte del mundo.
¿Quién es para los niños el Elf on the Shelf?
El buen recibimiento que tuvo fue sin duda gracias a la divertida y mágica historia que esconde detrás.
Para los niños, el Elf on the Shelf es un elfo ayudante de Santa Claus que llega a cada casa el 1 de diciembre o justo el día después de Thanksgiving Day para ver cómo si portan.
Cada noche, el elfo vuelve de forma mágica al Polo Norte y le cuenta a Santa qué tal ha ido el día.
Así, hasta que llega el 25 de diciembre y los niños ven si tienen regalos.
Una de las primeras cosas que deben hacer los niños al encontrarse al elfo es ponerle nombre.
Os dejo un listado de los nombres más típicos para el Elf on the Shelf.
Cada mañana al volver del Polo Norte y justo antes de que se despierten los niños, el elfo hace alguna travesura, deja mensajes de Santa o consejos para recibir más regalos.
Por ejemplo, ordenar la habitación o no pelearse.
Cuando los peques se despiertan lo primero que hacen es ver dónde está el elfo.
Una de las cosas más importantes para los niños es que no pueden tocar al Elf on the Shelf, porque sino éste perdería sus poderes mágicos.
ELF ON THE SHELF, ¡LAS MEJORES TRAVESURAS!
Como os podéis imaginar, las travesuras del Elf on the Shelf están preparadas por los padres y este caso, también por la Au Pair.
Lo que para los niños son trastadas del elfo, para los adultos es una explosión de creatividad en su máximo esplendor jajaja
Aunque lo más habitual es que las ideas se cojan de blogs o redes sociales.
Podéis elegir las mejores y haceros un calendario o improvisar cada día.
Para daros un poco de ayuda os dejo por aquí las mejores travesuras del Elf on the Shelf que he encontrado:
Podéis poner al elfo jugando con sus juguetes, peluches, juegos de mesa o incluso haciendo algún puzle.
¡Una travesura con papel higiénico tiene que haber seguro!
Y también alguna donde le hayan pillado con las manos en la masa.
El Elf on the Shelf les puede proponer juegos o pistas para encontrar cosas por casa y dejar mensajes muy divertidos o para que se porten bien.
También les puede dejar notas de Santa o incluso informes que deben completar para ser enviados directamente al Polo Norte.
Ya sabéis, la imaginación no tiene límites y cuanto más divertidas sean las travesuras, ¡muchísimo mejor!
Os vais a reír un montón mientras lo hacéis y por la mañana cuando los niños lo vean.
Eso sí, valorad el nivel de trastada que hacéis que luego lo vais a tener que limpiar o recoger vosotros porque os recuerdo que los niños no pueden tocarle.
¿Qué os parece el Elf on the Shelf?
¿A qué es una tradición navideña súper divertida?
Ya sabéis, solo se necesita un poco de imaginación o consultar este post.
Podéis personalizar las ideas para conseguir las mejores travesuras del elfo.
