¡Hola Au Pairs!
Uno de los motivos para volver a Irlanda, aparte por supuesto de ver a la familia, era visitar más zonas que no vi mientras vivía allí.
Y mi primera ruta pendiente fue ver la…
Península del Dingle
(Ya os digo desde el inicio que las fotos no engañan y es una auténtica pasada).
SALIDA DESDE DUNGARVAN
Por poneros un poco en situación, la Península del Dingle forma parte de la Ruta Costera del Atlántico, en el Condado de Kerry.
Se encuentra situada en la parte oeste del país y es uno de los paisajes de Irlanda más destacado por su belleza, colinas de un verde intenso y carreteras serpenteantes que te descubren con cada giro un nuevo paisaje.
¡Por no hablar de sus playas!
Desde Dungarvan en coche se tarda aproximadamente 2 horas y 30 minutos pasando por Cork y Killarney.
Para poder aprovechar al máximo posible, puesto que fuimos en febrero y se hace enseguida de noche, salimos bastante pronto de casa sin hacer paradas hasta el primer pueblo antes de llegar a la Península: KILLORGLIN.
KILLORGLIN: el pueblo de la cabra
Y llegamos a Killorglin, el pueblo de la cabra (y no es broma).
Fue lo primero que vimos al entrar por el pueblo, una enorme estatua de una cabra coronada y enseguida buscamos información a ver de qué iba todo esto.
Pues bien, cada año los días 10, 11 y 12 de Agosto aquí se celebra uno de los festivales más antiguos de toda Irlanda: el Puck Fair.
Básicamente consiste en que los habitantes del pueblo van a la montaña donde capturan a una cabra salvaje que llevan hasta el pueblo y es coronada.
Aparte claro está, hay mucha música en directo, competiciones de Guinnes y foodtrucks para comer al aire libre. Lo que viene siendo un festival a la irlandesa en toda regla.
Nosotras no coincidimos con el festival y en su lugar nos encontramos con un pueblo pequeño, con la mitad de las calles en obras y unos cuantos murales repartidos bastante bonitos.
Ah, y un bar de tapas español ganador de 2 reseñas Michelín.
Como lugar de paso, más que suficiente 🙂
Si paráis aquí a hacer un descanso os recomendamos ir a Bunkers Cafe. Nos gustó mucho su decoración por dentro y las camareras fueron muy amables.
PLAYA DE INCH
Y ahora sí que sí, empezamos la ruta por el Dingle.
Os dejo un mapa que nos dieron en el Bed&Breakfast y os va a venir muy bien. Si veis abajo a la derecha, lo primero que os encontráis siguiendo la carretera es la Playa de Inch, donde tenéis que parar sí o sí.
Es una de las playas más grandes de Irlanda con 4,5 kilómetros de largo.
Es tan larga que casi da la sensación de unirse al fondo con el Ring of Kerry, aunque por medio los separa el mar.
Sin duda lo que más me impresiona de estas playas tan grandes de Irlanda son las mareas. Con marea baja la playa parece el doble de ancha y puedes adentrarte varios km hacia el mar.
Además las fotos son preciosas con el reflejo del sol en la arena mojada.
Eso sí, cuando empieza a subir en menos de media hora lo tienes todo cubierto de agua.
En la playa tenéis una cafetería y un parking gratuito donde dejar el coche.
Nosotras estuvimos un rato en el parking comiendo unos bocadillos antes de seguir nuestra ruta por el Dingle.
DINGLE
Siguiendo la ruta avanzamos hasta el pueblo que da nombre a la Península: Dingle.
El camino por carretera es una pasada y las laderas verdes increíbles. Ya sabemos de dónde se sacan las típicas fotos de la Irlanda más verde 😉
Por el camino desde la Playa de Inch no hay muchos lugares para visitar por lo que fuimos bastante directas al pueblo.
Además se empezaba a hacer tarde y teníamos que buscar un B&B donde dormir.
3 cosas a tener en cuenta sobre los Bed & Breakfast:
- En el pueblo de Dingle hay muchos por lo que no tuvimos problemas para encontrar uno, aun sin reserva previa.
- En invierno no se sirven desayunos. (Nuestro gozo en un pozo).
- En la mayoría hay que pagar en metálico, por lo que aconsejamos tener dinero a mano para no tener que ir al cajero a sacar y que os cobren más por el cambio.
Por lo demás, el pueblo nos encantó.
Es bastante pequeñito, pero tiene una calle principal muy colorida con bastantes bares y bancos. Además, tiene un supermercado grande frente al puerto.
Si dudáis sobre qué población elegir para ser Au Pair, os recomiendo echar un vistazo a este post para entender mejor la diferencia entre ciudad y pueblo en Irlanda.
Nosotras dejamos las maletas en la habitación nos cambiamos y nos fuimos a cenar a Murphy’s Pub una buena hamburguesa con patatas. Y de ahí al pub a por una cerveza (o sidra).
La verdad que nos sorprendió la de ambiente que había para ser un pueblo pequeñito.
Y de ahí directas a la cama.
Que al día siguiente nos quedaba ver mucho más del Dingle y disfrutar con esta maravilla de paisajes.
Si queréis ver toda nuestra aventura, os dejo por aquí el vídeo de todo el día para que os acabéis de convencer (si no lo estabais ya) 😉 de visitar el Dingle.
