Halloween en Dungarvan

Lo admito, así como Carnaval es una fiesta que me encanta, Halloween nunca me ha llamado la atención.

Puede ser porque soy una cagada y si las películas de terror ya me dan mucho miedo, disfrazarse de cosas de este estilo no me hace especial ilusión.

Pero bueno, estábamos en Irlanda y algo había que hacer jajaja

Ya solo viendo las decoraciones de las casas entraban ganas.

No sé cómo será en los pueblos o ciudades de Irlanda en las que vais a ir o ya estáis. Para poneros un poco en situación, os cuento cómo lo celebran en Dungarvan.

Los preparativos de Halloween

Como os podréis imaginar, tanto las casas (que no todas) como las tiendas se preparan para la fecha.

En las tiendas suelen poner los escaparates decorados con telas de arañas, calabazas, murciélagos, textos de los escaparates con “sangre”, etc.

Decoración de Halloween en escaparates

Para las casas depende de lo motivados que sean sus habitantes con Halloween.

Había algunos jardines impresionantes con calaveras que se iluminaban al pasar, calabazas y gatos de mentira, esqueletos y telas de araña por las vallas de jardín… ¡una pasada!

Lo más típico es poner algún cartel terrorífico en la puerta y alguna tela de araña. Yo además hice con los peques las manualidades que expliqué en el post de “Decoración para Halloween”.

Y por supuesto, lo que no podía faltar es la CALABAZA.

¡Qué ilusión me hizo!

Orla compró una calabaza enorme y entre los niños y yo la vaciamos con las cucharas. Después les dibujé los ojos, nariz y boca y los cortamos. Y finalmente le pusimos la vela dentro, la tapa y a la puerta.

¡Estuvo toda la semana! jajaja lo que más gracia me hizo fue que los niños colocaron todo el relleno por fuera como si la calabaza lo estuviera vomitando.

Calabaza de Halloween
Calabaza de Halloween con luz

Lo que menos, pues que sentía que en cualquier momento abriría la puerta y me encontraría con una hilera de cuervos comiendo (no fue el caso).

El cole en Halloween

Para que no os pase como a mí, os informo de que en Irlanda los niños tienen una semana entera de vacaciones entre Septiembre y Navidad, y lo mismo después hasta Semana Santa.

En este caso, la primera semana siempre coincide con Halloween y este año ha sido desde el lunes 29 de octubre hasta el 2 de noviembre.

Justo antes el viernes antes, los peques van al colegio disfrazados. Puede ser con disfraces de Halloween o de cualquier otra cosa (como Odhran, que iba de Spiderman).

Menudo estrés aquella mañana porque Orla no estaba y había que vestir a Aideen de bruja y lo más difícil, a Sorcha de la novia cadáver.

¡Mirad si al final nos quedó bien que ganó el premio al mejor disfraz!

Disfraces de Halloween

Luego se vuelven a disfrazar el mismo día de Halloween y van casa por casa pidiendo chuches y chocolates.

Juro que se estuvieron dos días donde no comían otra cosa, cada uno con su montaña enorme de gominolas y chocolatinas en el salón.

Au Pairs Motivadas

Y llegó el día en que las Au Pairs lo celebramos saliendo de fiesta y descubrimos que Halloween es más para niños y Au Pairs que para el resto del mundo jajaja

Los niños porque les encanta y las Au Pairs porque venimos de fuera y no nos enteramos de nada… Ahora veréis por qué.

Primero, decidimos que nos disfrazábamos pintándonos la cara de la famosa calavera mexicana porque tampoco nos poníamos muy de acuerdo y eso era lo más “sencillo”.

O eso pensábamos.

Quedamos todas después de cenar en mi casa para pintarnos unas a otras y todo empezó bien, pero luego ya sabéis: el blanco no pinta tan blanco como debería, el rojo se mezcla…

Al final conseguimos salir bien pintadas y decidimos que podía ser muy guay hacer un botellón a la española con unos buenos calimochos. La pregunta era: ¿dónde?

A alguien se le ocurrió en una zona más o menos alejada, detrás de unas casas y mirando al mar había una especie de mini descampado con hierba y allí que fuimos.

Era muy chulo porque teníamos el mar delante y pudimos ver hasta fuegos artificiales.

Pero claro, entre juego y juego de beber se nos fue de las manos y los irlandeses que no están acostumbrados…

De pronto oímos perros y un hombre que nos gritaba a la distancia y entre el susto y el vino lo único que se nos ocurrió fue salir corriendo jajaja

De ahí nos fuimos a nuestro querido bar: el Anchor, pensando que estaría todo decorado y todo el mundo disfrazado.

¿Veis a alguien más disfrazado en la foto detrás de nosotras?

Fiesta de Halloween

Pues no, porque no había.

En todo el bar y nosotras las únicas motivadas de Halloween. El resto iba vestido como un día cualquiera jajaja ¿por qué nadie nos avisó de esto? Misterios de la vida.

Pero bueno, nosotras a lo nuestro. Unas cervezas y todo arreglado. De ahí nos fuimos a la discoteca y ya allí sí que lo acabamos de dar todo.

Hasta las 3, no os vayáis a pensar. Que el tema de cierre de las discotecas es otra historia.

Y hasta aquí mi gran día de Halloween en Dungarvan.

Tengo que admitir que al final me lo pasé genial y lo de disfrazarme no me disgustó tanto. Sobre todo cuando no hay nadie más 😉

Comments
  • Marta
    Responder

    Qué gran noche! Lo bonito que es Halloween en Irlanda!

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